Via Universitària y la importancia de conocer mejor a los estudiantes universitarios
La universidad ha sido escenario de importantes cambios en las últimas décadas: entre otros, cambios en el capital cultural, en las competencias y en las motivaciones de los nuevos estudiantes universitarios. Los datos disponibles demuestran que se está produciendo una evolución de lo que socialmente se entiende por "ser estudiante universitario". Y se están desarrollando diversas formas de entender el estudio y la participación en la universidad. Por un lado, hay una tendencia a que se vayan incorporando a la universidad estudiantes cada vez de mayor edad, y con distintos ritmos de vida, ya sea por razones familiares, sociales o económicas. Estudiantes que, en muchos casos, ya no tienen la formación universitaria como único interés, bien porque deben compartirla con una dedicación laboral o bien porque tienen otras actividades que reclaman su atención. Y, por otro lado, también se detectan cambios en las intensidades y los modelos de dedicación al estudio.
A pesar de la existencia de iniciativas anteriores, el interés por las condiciones de vida de los estudiantes creció con la creación del Espacio europeo de educación superior. En el comunicado final de la cumbre ministerial de Londres de 2007 se afirmaba que la educación superior tiene que colaborar en el fortalecimiento de la cohesión social, la reducción de las desigualdades y la mejora de los niveles de conocimiento, habilidades y competencias en la sociedad. Y se propone alcanzar esos objetivos garantizando que los estudiantes reflejen la diversidad social en todos los niveles formativos, también en la universidad. Miquel Martínez i Ernest Pons - Catedrático de Teoría de la Educación, miembro del GR en Educación en valores y desarrollo Moral de la UB e investigador de EcoViPEU · Profesor titular de Economía de la UB e investigador de ECoVIPEU