Publicación bimestral de AQU Catalunya

71

Marzo 2014

Sin ninguna duda, la acreditación de titulaciones es el mayor reto que AQU Catalunya tiene planteado para este año, y posiblemente también para los venideros. A diferencia de la verificación, un proceso insólito en el ámbito mundial y con una detallada y compleja regulación estatal, la acreditación es un proceso que existe en todo el mundo y, de hecho, es la tarea más relevante que debería desarrollar una agencia de calidad universitaria.

El proceso de acreditación se fundamenta en una visita al centro docente que, a partir de los indicadores y evidencias recogidos en un autoinforme y de las informaciones aparecidas en las distintas audiencias, debe servir como mínimo para comprobar que cada uno de los títulos se imparte de acuerdo con las condiciones establecidas en el momento de la verificación. Una acreditación favorable debe permitir que los centros docentes certifiquen los títulos de grado (y doctorado) a sus titulados durante un período de seis años, y los de máster por cuatro años. Sin duda, esta sutil diferencia de dos años, fijada por el legislador, dificultará que AQU Catalunya establezca fácilmente un calendario regular de visitas en los centros donde se impartan simultáneamente grados y másteres, la mayoría de los del sistema, dicho sea de paso.

De hecho, la normativa estatal no lo pone fácil. El procedimiento, ya desde el inicio, obliga a acreditar por títulos y no por centros docentes, como parecería lógico. Teniendo presente que muchos de los recursos personales y materiales implicados en un título lo están también en el resto de los títulos que se imparten en un centro, desde AQU Catalunya se ha planificado llevar a cabo todo el proceso focalizándonos en los centros docentes y, por consiguiente, en todos los estudios que en ellos se organizan. Desgraciadamente, debido al distinto inicio de los títulos de un mismo centro, esto no siempre será posible, aunque se establecerán los mecanismos necesarios para facilitarlo al máximo.

En cualquier caso, el proceso de acreditación de ninguna forma puede convertirse en un "pasa o no pasa". Justo lo contrario: debe ser un proceso fundamentalmente de ayuda a la mejora, y sobre ello estamos meditando desde AQU Catalunya. Así, por ejemplo, durante los últimos meses, hemos estado trabajando para integrar al máximo el proceso de seguimiento de los títulos en el de acreditación, al mismo tiempo que estamos adaptando el WINDDAT a este nuevo proceso. El objetivo es claro: con la mínima información posible tiene que lograrse el máximo valor añadido. De ese modo, si por un lado se solicita la mínima información imprescindible a las universidades durante la visita del comité de evaluación externo, por otro nuestros esfuerzos deben centrarse en la aportación de valor añadido en los informes de acreditación. Debemos ser el instrumento que impulse aquellas pocas, pero concretas, acciones que ayudarán a mejorar, de forma continuada, cada uno de los estudios del sistema universitario catalán.

A todo esto hay que añadir la voluntad de AQU Catalunya de integrar el propio proceso de acreditación con otros que aporten a las titulaciones un valor añadido. Veamos dos ejemplos de ello: la agencia catalana está estableciendo convenios con otras agencias de reconocido prestigio en el ámbito europeo para certificar diferentes labels o sellos de calidad para las enseñanzas impartidas, aprovechando el propio procedimiento de acreditación; y también estamos desarrollando las guías metodológicas para certificar los sistemas internos de gestión de la calidad, según las directrices del programa AUDIT, que deben permitir a medio plazo dotar a las universidades de procesos de autoverificación de las titulaciones, tal y como apunta la revisión de los criterios y directrices europeos de garantía de la calidad.

Con estos objetivos, AQU Catalunya visitará en este año 2014 unos 30 centros, a fin de acreditar más de 100 títulos de grado y máster. Es sólo una pequeña parte de los que se imparten en toda Cataluña (aproximadamente, el 10% del total), y todavía quedarán por acreditar, en 2015 y 2016, la mayoría de los títulos del sistema. Con todo, es una buena muestra para que tanto AQU Catalunya como las universidades se inicien en este nuevo proceso, que —repito— tiene un espíritu de mejora continua. Si logramos que la acreditación nos sirva a todos para mejorar el sistema universitario catalán de una manera simple y eficaz, ya habremos cumplido.

Y, para dar a conocer los objetivos y funcionamiento de las visitas externas a las universidades y el proceso de acreditación, hemos organizado, para el próximo 28 de abril de 2014 en la Universitat Autònoma de Barcelona, una jornada sobre la acreditación de las titulaciones universitarias oficiales, en la que os invito a participar.