Por lo tanto, la digitalización es claramente una fuente de competitividad y prosperidad. Si tenemos que pensar en los dos grandes ingredientes que se necesitan para impulsarla, yo seleccionaría claramente la tecnología y el talento. Mientras que la primera es cada vez más accesible y abundante, el talento digital es un recurso escaso. Dos datos lo corroboran: en el periodo 2017-2019 la demanda de perfiles digitales en Barcelona creció un 80 % y la oferta solo un 23 %; durante 2020 el sector de las TIC de Cataluña creció en 14.700 empleados, mientras que el conjunto de la economía perdió 138.000 puestos de trabajo.
En este contexto, parece evidente la necesidad de formar a profesionales que provengan de la parte baja de la K hacia competencias digitales, tan necesarias en los sectores y las empresas que sí están aprovechando la oportunidad que supone la digitalización. Este es el objetivo que persiguen los cursos impulsados desde Barcelona Digital Talent, de la mano de Mobile World Capital Barcelona y de los departamentos de Trabajo Asuntos Sociales y Familias y de Empresa y Conocimiento de la Generalitat.
Partimos de un análisis basado en big data para entender cuáles eran las profesiones digitales más demandadas: desarrollo de software, big data, la nube, ciberseguridad, etc. El paso siguiente fue, con la ayuda de más de 150 empresas tecnológicas del 22@, describir el marco de competencias requeridas en estas profesiones (lenguajes de programación, entornos de software, competencias soft...). Y, con todo ello, un grupo de expertos universitarios convirtió estas competencias en seis itinerarios de formación que, gracias al papel de AQU Catalunya, han podido incluirse por primera vez en el catálogo de formación del SEPE como formación profesionalizadora digital de los niveles 4 y 5.
Aumentar el nivel de la formación, garantizada metodológicamente por AQU Catalunya, y haber contado con las mismas empresas demandantes de talento en el diseño de la formación hacen que aumenten claramente las posibilidades de éxito de estas formaciones, que, con la financiación del Servicio Público de Empleo de Catalunya (SOC), contribuirán a que muchos profesionales tengan una nueva oportunidad en esta nueva economía, impulsada por la digitalización y en la que el talento es su valor más preciado.