Las universidades de Cataluña son instituciones consolidadas como centros de docencia orientados a la empleabilidad, que ofrecen un conjunto de titulaciones de calidad que dotan a las personas de las competencias y cualificaciones requeridas por el mercado laboral. Esta es la principal conclusión extraída en la última jornada del ciclo «Empleabilidad y formación universitaria» de AQU Catalunya, en que se reflexionó sobre la idoneidad de las titulaciones universitarias en el ámbito de las Ingenierías de la Producción en relación con su capacidad de dotar a las personas graduadas de herramientas que les permitan rendir y crecer en su labor profesional. Este ámbito incluye los grados de los subámbitos de Ingeniería Naval, Ingeniería Aeronáutica, Ingeniería Electrónica y Automática, Ingeniería Mecánica y Diseño Industrial, Ingeniería Química y Materiales e Ingeniería Industrial y Organización.
Este ciclo es también la culminación del ambicioso proyecto Empleadores de AQU Catalunya, iniciado en 2014 con el objetivo de incorporar al sistema de datos producidos por la Agencia la voz de las entidades y empresas que contratan a personas recién graduadas. En consonancia con las líneas estratégicas de AQU Catalunya, esta jornada contribuyó a facilitar el acceso a datos cuantitativos y cualitativos que, de manera integrada, permitieron elaborar propuestas de mejora de la calidad de las titulaciones de grado analizadas.
En este sentido, el evento incorporó una ponencia de un experto académico de proyección internacional, el profesor Antoine van den Beemt, de la Eindhoven School of Education, que habló sobre el uso del aprendizaje basado en retos en los grados de Ingeniería y enriqueció el debate con información sobre cómo se articula la educación universitaria que quiere reforzar las competencias más solicitadas por el mercado laboral. A continuación, el personal de AQU Catalunya llevó a cabo una presentación sobre la oferta y la demanda, la satisfacción, la inserción laboral y la opinión del colectivo empleador sobre las personas graduadas en el ámbito analizado. Por último, una mesa redonda formada por expertos académicos, empleadores y alumni fue la encargada de integrar la perspectiva del ponente internacional, los datos de AQU Catalunya y la experiencia de las personas que participaron para formular propuestas de mejora de las titulaciones.
Aunque los datos presentados demuestran que las personas graduadas en estas titulaciones están generalmente satisfechas con su formación —aunque encontramos diferencias entre titulaciones, como se explica en el informe elaborado por AQU Catalunya—, tienen una buena inserción laboral y contribuyen positivamente a sus puestos de trabajo, la jornada permitió identificar puntos de mejora, condición necesaria para mantenerse en un proceso continuo hacia la excelencia. Por ejemplo, en cuanto a la satisfacción con las prácticas externas de las personas graduadas en este ámbito, se identificó que tienden a estar más en desacuerdo con la afirmación «las prácticas externas me han permitido aplicar los conocimientos adquiridos durante la carrera» que el conjunto de personas tituladas en el SUC.
La mesa redonda trató estos y otros puntos de mejora y propuso un conjunto de medidas para mejorar el aprendizaje de las personas graduadas en Ingenierías de la Producción desde la perspectiva de la empleabilidad. En primer lugar, en cuanto a las tres competencias que más entidades empleadoras identifican como mejorables y que se puede ver en la tabla siguiente, la mesa redonda planteó el uso de metodologías docentes como el aprendizaje basado en retos, la planificación de asignaturas que incorporan conocimientos interdisciplinarios y la introducción en el aula de problemas reales propuestos por el mundo laboral, pidiendo al estudiantado que sugiera soluciones y contrastándolas con representantes del colectivo empleador.
En relación con la comunicación efectiva con personas sin formación técnica —otra de las competencias que más entidades empleadoras ven con mayor margen de mejora y que coincide con la percepción del estudiantado, que tiende a estar menos satisfecho con la adquisición de habilidades comunicativas que el conjunto del sistema universitario—, la mesa redonda propuso la implantación de un conjunto de recursos pedagógicos tanto en el aula como durante las estancias de prácticas. Estos recursos incluyen el uso de herramientas multimedia en el aula como la grabación de presentaciones en vídeo, el fomento de la participación activa e inclusiva en el aula y la elaboración de ejercicios de argumentación tanto oral como escrita vinculados a encargos concretos durante el periodo de prácticas.