CompartirIngenierías de la Producción, buenas perspectivas laborales y satisfacción notable por parte del colectivo empleador
AQU Catalunya ha presentado hoy el Informe sobre Empleabilidad y Formación universitaria en Ingenierías de la Producción en el marco de una jornada que lleva el mismo nombre. Este informe señala que las Ingenierías de la Producción mantienen tres características: alumnado altamente masculinizado, sobredemanda por las buenas perspectivas laborales y baja tasa de estudiantes que acaban dentro del tiempo previsto. El colectivo empleador valora con un notable las competencias adquiridas por las personas tituladas y más de la mitad expresa que ha tenido problemas a la hora de contratar debido a que es necesario mejorar la capacidad para aplicar los conocimientos adquiridos y resolver problemas en entornos nuevos o poco conocidos.
El último informe elaborado por AQU Catalunya sobre la empleabilidad de los graduados y las graduadas en grados del ámbito de las Ingenierías de la Producción pone de manifiesto las tres características que siguen existiendo en estas titulaciones. La primera es que estos grados —que pertenecen a los subámbitos de la Ingeniería Naval, la Ingeniería Aeronáutica, la Ingeniería Electrónica y Automática, la Ingeniería Mecánica y Diseño Industrial, la Ingeniería Química y Materiales, y la Ingeniería Industrial y Organización— resultan especialmente complicados para los y las alumnas que los cursan, ya que sólo un 44% los terminan dentro del tiempo teóricamente requerido. Esta cifra resulta especialmente baja si se compara con la media del Sistema Universitario Catalán (SUC), donde un 79,4% de los alumnos acaban sus grados dentro del tiempo previsto. Es decir, un 35% más que en las mencionadas ingenierías.
La segunda tendencia es la existencia de un alumnado altamente masculinizado. Durante el curso 2020-2021, por ejemplo, 8 de cada 10 personas matriculadas en las Ingenierías de la Producción eran hombres.
En tercer lugar, resulta destacable cómo este conjunto de grados tienen una sobredemanda de plazas mucho menor a la media del SUC, que es del 39% mientras que la específica de las Ingenierías de la Producción es del 6%.
En cuanto a la satisfacción del alumnado con los estudios cursados, destaca su satisfacción con la adquisición de competencias personales y profesionales —que alcanza un notable, valor similar al conjunto del SUC— aunque muestran una media de satisfacción con la consecución de habilidades comunicativas más baja que el conjunto del SUC (6,1 vs 7,1).
También destaca que el número de estudiantes que han escogido la titulación porque tiene buenas perspectivas laborales es 17 puntos porcentuales más elevado que el porcentaje global del SUC y llega al 30% de los matriculados. Ingeniería Industrial y Organización es el grado que más destaca en este sentido y el 47% de los y de las estudiantes aseguran que las salidas fueron el motivo que les hizo escoger la carrera.
Este objetivo profesional de muchas de las personas que eligen la carrera se ve recompensado cuando la acaban, ya que los datos demuestran las buenas tasas de inserción de estos grados. Por ejemplo, que el 93,2% de los graduados trabajaban tres años después de haberse titulado, un 3% más que la media del SUC. Por otro lado, el salario bruto mensual de las personas graduadas tres años después de acabar también es significativamente más alto que el valor medio del SUC y alcanza los 2.688 euros mensuales. La estabilidad contractual también es una característica específica de las buenas salidas de las ingenierías de la Producción, ya que el 76,1% tienen un contrato laboral fijo, casi 20 puntos porcentuales más que el global del SUC, que es del 56,3%.
Respecto a los empleadores de las personas graduadas en este ámbito destaca que un 55% expresan que han tenido problemas a la hora de contratar. La falta de personas tituladas que reúnan las competencias necesarias para ocupar el puesto de trabajo es la respuesta que en el 61% de los casos explica estas dificultades. En esta línea, un 48,9% de las entidades empleadoras encuestadas opinan que la capacidad para aplicar los conocimientos adquiridos y resolver problemas en entornos nuevos o poco conocidos es la competencia que más deberían mejorar las personas graduadas en Ingenierías de la Producción. No obstante, los empleadores y empleadoras valoran con un 7,5 las competencias que se enseñan en las universidades en este ámbito.
Publicación "Empleabilidad y formación universitaria en el ámbito de las Ingenierías de la Producción"
Acceso a la infografía con los resultados principales
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